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Lo prometido es deuda, y aquí va mi post:
Desde luego, yo tenía pensado estudiar, pero como Tere estaba un poco "chof", decidí que mejor emplearía mi tarde en animarla que en estudiar patología del aparato digestivo, que por cierto, le estoy cogiendo un poco de tirria, la postergo cada vez más, siempre encuentro algo mejor que hacer... con lo que a mi me gustaba cardio... aisss y que rápido se acabó, aunque creo que hoy ya no se me escapa... Bueno a lo que iba:
Cogimos el coche y nos dirigimos a Xanadoo, uno de los centros comerciales más grandes de Madrid. Si ahí estábamos las tres, Tere, Helen y yo... por el mundo adelante, al llegar empezamos a recorrerlo de alante atrás y de arriba abajo... Como no, yo en mi salsa al entrar en las zapaterías, creo que sería odiada por más de la mitad de ellas; después de mirarlo por todos los ángulos posibles, probármelo, caminar un rato, y retorcerlo en sus 3 dimensiones digo -no, este no, no es cómodo y carga demasiado el talón...- lo siento pero no puedo comprar algo que vaya en contra de mi biomecánica... por eso soy un poquillo desesperante...
Después nos compramos chapitas, las típicas que te compras con esta edad, con algún emblema reivindicativo o jocoso, debemos pensar que el mundo va a cambiar por leer nuestras estupendas frases de diferentes tamaños y colores, amontonadas en la solapa de un bolso, alguna de ellas dice "piensa globalmente y actúa localmente"... pero soy feliz...
Después decidimos que estábamos suficientemente agotadas y debíamos merendar:
"realmente después de probarte 3 vestidos que no vas a comprar, hacer guerra de colonias en una perfumería, echarnos máscara de volumen en un ojo y de definición en el otro, comprar 5 chapas y analizar los zapatos de los escaparates (¡furea los zapatos de punta!) decidimos que estábamos suficiente cansadas"
Suficiente cansadas como para tomarnos un "Frapuchino" y una madalena, ooooh pero que buenísimo estaba, creo que entre las tres nos cepillamos los tarros de vainilla, chocolate y canela :), pero es que estaba taaaan riiico, si... mereció la pena, un día es un día.
Después de recuperar fuerzas nos levantamos, con la tripita bastante llena, y seguimos nuestra ruta... y ahí estaba, como llamándome, veeeeen, siiiieeeeeeeeentaaateeee... cuanto tiempo buscándolo, y al final me lo compré, un puff... que cómodo que es... digo es porque estoy sentada en él en estos momentos, consta de dos piezas, una que se adapta a la espalda y los brazos, y otra para reposar tu trasero. Pes eso... ya nos ves cargando el resto de tarde con dos cojines enormes por el centro comercial... fue muy divertido, realmente divertido, estubimos haciendo vídeos y sacándonos fotos casi toda la tarde, la gente debía pensar que estábamos un poco locas pero la verdad es que nos reimos bastante.
Al final del día fuimos a cenar y escogimos un mejicano, aiiis no puedo con la salsa picante, y yo que metí la patatita entera en la salsa porque pensé que no picaba... si, si, ya se que estaba en un mejicano... pero una que es así de despistada siempre, que se le va a hacer, a mi lengua por lo menos no se le olvidará...
Después salimos por la puerta contraria y ya nos ves bordeando el centro por fuera, que como era pequeño... hasta que por fin llegamos al coche, a mi, por supuesto me tocó ir atrás, con mi nueva adquisición...
Al llegar a la habitación todavía nos quedaban fuerzas para darnos clases recíprocas de nuestras respectivas carreras, Tere explicándonos lo que era una "zapata", los tipos y donde se colocaban, y yo por mi parte explicánde a Tere las consecuencias que acarrean una "estenosis" y una "insuficiencia" de la "válvula Mitral"...
Si, así somos nosotras...
Ayer por la mañana me fui a leer un libro de Quino a la biblioteca, pero de hoy no pasa digenstivo... :)
Un beso muy grande y felicidad por doquier a todos los rincones del mundo mundial...
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